“La fiesta del pasado sábado en el Zócalo de la Ciudad de México, organizada para atacar a la oposición y negar la realidad en la que se encuentra el país, es un insulto para las miles de familias que están enlutadas por la violencia que azota al país y que viven, sin esperanza, bajo la amenaza del crimen organizado”, aseveró el Secretario de Estudios del CEN del PAN, Fernando Rodríguez Doval.
El también exsecretario general del PAN acusó que López Obrador es un gran cínico cuando asegura que “ahora no se reprime al pueblo, no se ordenan masacres, no hay tortura, no se tolera la violación de los derechos humanos y tampoco existe hoy en México un narcoestado como lo padecimos”, como presumió en su discurso del pasado fin de semana.
Y es que, precisó Rodríguez Doval, “el crimen es el que hoy, apoderado de prácticamente todo México, reprime, masacra, tortura y viola todos los derechos de las personas que no pueden escapar de sus garras, bajo la complicidad de un gobierno que reparte abrazos a quienes arrebatan la tranquilidad, patrimonio y las vidas de quienes son inocentes”.
El también exdiputado federal recordó que los levantones, los asesinatos, las extorsiones, los robos, entre otros delitos, son cosa de todos los días sin importar la hora, el lugar o, incluso, si hay fuerzas del orden presentes, y que no son pocos los testimonios de víctimas que acusan que no pudieron denunciar, porque fueron persuadidos por las autoridades o simplemente fueron ignorados. Además, dijo, sus propias cifras lo evidencian: junio cerró como el mes más violento en lo que va del año, con un promedio de 77 homicidios diarios, según cifras preliminares de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana.
“Para nadie es un secreto en dónde tiene AMLO la cabeza y todos sus esfuerzos: en darle cauce al odio que siempre lo ha caracterizado, en destruir a la oposición, a la democracia, a las instituciones. Está más pendiente de la oposición que de México. López Obrador es el único que se cree su cuento de que “hay justicia y tranquilidad social y se avanza hacia la erradicación de la violencia”, y por eso se da el lujo de no ser presidente, pero sí ser jefe de partido, de Morena, de un proyecto que como ninguno en la historia reciente ha dañado a los mexicanos, con una destrucción que no solo ya es visible, sino que promete ser difícil de superar”.
Finalmente, el también politólogo destacó que la oposición, y en concreto Acción Nacional, tiene una propuesta robusta para salvar a México del odio, de la destrucción y de los egos de López Obrador: “AMLO sabe que su falsa austeridad, su proyecto de aprendiz de dictador, de “amo” de México, se topó con pared. Sabe que vamos a ganar y que su era tiene los días contados. Sin embargo, todavía está a tiempo de corregir el rumbo. Lo urgimos a asumir el papel para el que fue electo hace cinco años. México merece y necesita un Jefe de Estado”, concluyó.