El presidente Andrés Manuel López Obrador usa a la pobreza como botín político para construir clientelas electorales en lugar combatir la lacerante desigualdad del país, indicó la senadora Lupita Saldaña Cisneros frente a la secretaria de Bienestar, Ariadna Montiel Reyes.
Durante la comparecencia de la funcionaria federal con motivo de la Glosa del IV Informe de Gobierno, la legisladora panista sostuvo que los números no mienten: “Según el Coneval, de 2018 a 2020 las personas en condiciones de pobreza aumentaron en casi 4 millones y se estima que en 2022 la cifra sea aún mayor”.
De igual manera, destacó que en materia de pobreza extrema en el mismo periodo pasamos de 8.7 a casi 11 millones y que los hogares más pobres beneficiarios de programas sociales han disminuido: “En 2016 era del 68 por ciento y actualmente sólo es un 52 por ciento, o sea que casi 20 por ciento de los hogares más pobres han quedado desprotegidos por la política social de esta administración”.